Fase final de las obras hasta final de año

Publicado en el Heraldo el 27-09-2010

Las obras del tranvía, en la recta final
Los trabajos estarán casi concluidos a finales de año para dejar paso a las pruebas Esta semana se retoma en Vía Ibérica la instalación de marquesinas y se empieza a actuar en las aceras de Fernando el Católico

Las obras de la primera línea del tranvía empiezan a ver la luz. Cuando se cumplen 12 meses de afecciones al tráfico y pese a que las zanjas y las molestias todavía persisten a lo largo del trazado, los avances son notables en numerosos tramos y a finales de año los trabajos estarán prácticamente concluidos para que puedan dar comienzo las pruebas en vías de los Urbos 3, que están en fase de fabricación en la factoría de CAF.
Según la sociedad Los tranvías de Zaragoza, en estos momentos ya se ha colocado un 99% de de los 13,5 kilómetros de vías, están instaladas dos terceras partes de los cables de catenaria (en total habrá más de 26.000 metros) y sólo faltan 25 postes de los 395 que figuran en el proyecto. "Las obras van en plazo", insiste la concesionaria de la infraestructura.

En el inicio de la línea, en Valdespartera entre las calles de Un americano en París y Cantando bajo la lluvia, se han colocado los raíles en la zona donde se produce el giro del tranvía. Es uno de los puntos más retrasados, ya que fue uno de los últimos en iniciarse. Todavía no hay ni postes de catenaria y la urbanización está en una fase incipiente.
Pero conforme se avanza por el barrio se confirman los progresos. Hay tramos en los que se han retirado las vallas y las dos marquesinas colocadas a la altura del paseo de Los olvidados confieren a la línea una imagen de que la apertura es inminente. En esa zona los trabajos se centran en el ajuste de la catenaria.
Con la plaza de Bámbola cerrada, las principales afecciones se concentran en la calle de Volver a Empezar, uno de los accesos al barrio. "Su apertura es inminente", explican fuentes de la sociedad Los Tranvías de Zaragoza, adjudicataria de la construcción y explotación de la línea.
En las cocheras En la entrada a Valdespartera, el edificio de talleres y cocheras está prácticamente concluido en su zona exterior y se está trabajando en el cableado interior y en los sistemas de climatización. Fuentes de la concesionaria explican que se están colocando los sistemas de reparación y mantenimiento de los vehículos y el muro perimetral que da a Gómez Laguna está casi listo. En total, 24.000 metros cuadrados construidos, con dos fosos de 45 metros de largo para la reparación de los convoyes. El complejo, que será además el cerebro desde donde se controlará toda la línea, tiene capacidad para 12 vehículos, además de otros 6 que se podrán dejar en las vías del taller.
Según explican los responsables de Los Tranvías de Zaragoza, las oficinas y la tabiquería interna de las cocheras están finalizadas, y ahora se trabaja en la electricidad y la fontanería. Se han colocado un total de 70 postes de catenaria y se ha empezado a instalar cable.
Tras salir de Valdespartera, Vía Ibérica progresa a buen ritmo, con los postes y la catenaria colocados. Una de las semicalzadas por donde ahora circula el tráfico en dirección a la salida de la ciudad, está terminada. La otra, actualmente cerrada a la circulación, sólo está pavimentada en el tramo más próximo a la rotonda de Toulouse y en la actualidad se trabaja en las conexiones eléctricas. Pero al ser uno de los tramos más adelantados, está previsto que esta misma semana se empiecen a colocar algunas marquesinas. Por ejemplo, frente al Stadium Casablanca, donde está construido uno de los andenes de unos 70 metros de longitud.
Las paradas, diseñadas por Iñaki Alday, tienen 15,40 metros de largo por 2,80 de ancho e incorporan una cubierta vegetal. En total se instalaran 19 marquesinas, tres de ellas dobles, que incorporarán la máquina expendedora (el sistema de billetaje se adjudicó a la empresa Ikusi en mayo).
Tras salir de Vía Ibérica, la rotonda de Toulouse sigue levantada a la espera de su urbanización aunque las vías están en su sitio. es uno de los puntos donde hay más circulación, al enlazar la Z-30 con Vía Hispanidad, y las dificultades para transitar son notables. Además, las obras impiden dar la vuelta completa en este punto y, de momento, no hay plazos para que vuelva a la normalidad.
En el entorno del Hospital Miguel Servet, las vías ya están colocadas y los operarios se afanan en la finalización de las obras del colector de la calle de Jerusalén, informa la sociedad Los Tranvías de Zaragoza. es a partir de ese momento cuando las zanjas se multiplican, con la urbanización en mantillas.
Fernando el Católico, patas arriba
Junto al arranque de la línea, en Valdespartera, el tramo de Fernando el Católico sigue en precario. Aunque la acera de los números impares está concluida, el bulevar está patas arriba a la espera de que avance su urbanización. No en vano, es uno de los pocos sitios en los que prosiguen las tareas de sustitución de las tuberías de abastecimiento de agua. Sin embargo, a partir de esta semana se empezará a trabajar en la pavimentación de las aceras.
Otro de los puntos delicados de las obras es el cruce de la avenida de Goya con Gran Vía, ya que allí coinciden los tajos de la línea del tranvía con los de la estación de cercanías. Además, es una de las zonas con más tráfico de la ciudad. De momento, están en fase de colocación las vías más próximas a Fernando el Católico. Después se acometerá la zona central del cruce, que casi no causará afecciones y, finalmente, se actuará en el tramo más próximo a Gran Vía. ese lugar será el más complejo por cuestiones de espacio y no se descarta que haya que cortar un sentido de circulación.
En Gran Vía, el paseo que ha sufrido las afecciones más graves por las obras del tranvía, es, sin duda, la que en estos momentos está en mejor situación. De hecho está previsto que durante las fiestas del Pilar se habilite el bulevar para colocar los puestos de las casas regionales. El tráfico está abierto en los dos sentidos, ya se advierten las diez 'hojas' donde se colocarán los juegos infantiles y está trazada la zanja para la vía de escape que necesita el tranvía para dar la vuelta.
Artículo de M. Lopez. Fotografías de Oliver Duch.